Adaptación de alto presupuesto de la novela homónima de Jane Austen. Remake si se quiere del clasico de 1940 en el que Laurence Olivier cae rendido a los pies de Greer Garson. Curiosamente Aldous Huxley fue uno de los escritores involucrados en la adaptación de este film en blanco y negro. De la versión americana ni hablamos.
En esta versión de 2005 vemos como el personaje de Lizzie vuelve a enamorar locamente a Mr. Darcy, encarnados por la aparentemente omnipresente Keira Knightley y el algo gris Matthew MacFadyen. Los decorados reflejan perfectamente la alta calidad de la producción y la época que representan, brillantemente filmados por Joe Wright (otro que repite) al que quizá se le puede acusar más de preocuparse por sus planos continuos que por la expresividad de sus actores.
Impagables las actuaciones de los veteranos del rodaje: Donald Sutherland, Judi Dench y la memorable ‘madre’ de Keira, Brenda Blethyn.
Lo cierto es que la película viene que ni pintada para recordar eso de que la familia como la conocemos y que tanto nos empeñamos en ‘preservar’ no es tan establecida como muchas veces creemos.
En fin. Para verla un par de veces en la vida y leerse el libro de Jane Austen para acordarse de lo pestiñamente florida que es la literatura de otro siglo.
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